Hoy dejaremos el parque de Jasper para entrar en el de Banff, en el recorrido vamos recopilando formidables sorpresas…
Montañas, ríos, glaciares… a cada cual más hermoso…
Los glaciares casi a pie de carretera…
Se aprecia el gran espesor del glaciar al filo del acantilado …
Una catarata que no está ni señalizada…
Y llegamos al gran atractivo del día, el Glaciar Athabasca, una extensión enorme de hielo perenne que es uno de los seis brazos principales del campo de hielo Columbia. Aquí una de sus lenguas…
Otra…
Y la tercera que pisaremos de aquí un rato…
Hay tres zonas en las Montañas Rocosas. La primera zona es la que incluye Banff y Jasper, corresponde a la menor altitud, temperaturas más cálidas y es donde predominan los osos y los alces. Segunda zona (donde estamos ahora) y donde se encuentran las cabras montesas y los borregos cimarrones y la tercera es la Alpina donde frecuentan águilas, es la zona más alta.
Para poder llegar al glaciar nos montaremos en unos grandes autobuses, el conductor australiano nos dice que sólo hay 24 vehículos como este en el mundo y cuestan 1,3/1,4 millones de dólares canadienses. En 2012 los renovaron y así pudieron reducir el 50% de sus emisiones. Tienen planificado cambiarlos de nuevo por eléctricos dentro de dos años. Aquí podéis ver la parte interior delantera y la exterior con un indio (de la India) “jodefotos”.
Nos dejan 30 minutos a buena temperatura y visibilidad para pasear, ver el increíble entorno y hacer fotos en medio del glaciar aunque la presencia de muchos turistas, el espacio permitido limitado y las altas posibilidades de resbalar provocan que no sea fácil hacer las fotos que desearíamos, aun y así aquí van algunas…
Noa, un milisegundo antes de caerle encima un poco de glaciar…
Dos chicas de “15” años…
El hielo glacial es más denso que el normal y un glaciar tarda miles de años en formarse. Para formar 1 metro cuadrado de glaciar se necesitan unos 5 o 6 años. Aquí podéis ver el puro tono azul…
Para ser considerado un campo de hielo se necesitan, como mínimo 2 glaciares, Athabasca tiene 6.
Este campo de hielo es una de las mayores fuentes de agua de América del Norte.
Detrás de este lugar está la montaña de Andrómeda donde se acumula una gran masa de nieve ya que, cada año caen entre 8 y 9 metros.
Los glaciares se van desplazando lentamente, arrastrando tierra y roca hacia el exterior y abajo, formándose así las morrenas. La materia que “ensucia” el glaciar se llama Kraocanita.
Algunos de los árboles de la zona tienen 300 años. El bosque más antiguo tiene algunos ejemplares de alrededor de 800 años.
Esta zona empezó a ser explotada por los colonizadores a finales del siglo XVIII y cambiaron el modo de vida de los nativos de la zona.
En 1843 el glaciar tuvo su máxima superficie, cubría toda el área hasta los límites del estacionamiento al lado de la carretera. El cambio climático está produciendo un retroceso muy drástico de todas las masas de hielo. Estas montañas no se han escapado de este problema. El guía afirma que el de Andrómeda es el que se derrite más rápido en toda la historia de la humanidad ya que depende, de forma independiente y exclusivamente de las nevadas.
Bajando de la lengua del glaciar podemos ver dos lagos: el más pequeño es bastante reciente, se está formando desde hace 5 años.
Segunda parada: el Skywalk que está a 280 metros del suelo y 30 metros de la carretera.
Aquí se ven las lejanas cascadas que alimentan al río Sunwapta…
Una panorámica del Skywalk.
Desde dentro…
Y dos perspectivas, hacia abajo y hacia arriba del valle…
Da vértigo ver el Rio Sunwapta por el valle debajo de nuestros pies…
El glaciar Athabasca está entre el parque de Jasper y Banff, por lo que nuestro itinerario a partir de ahora seguirá por éste parque.
La historia del parque de Banff está muy ligada a la de los Ferrocarriles del Pacífico de Canadá (FPC) ya que construyeron el Hotel y el Château Lake Louise (entre muchas otras infraestructuras) para atracción del turisteo.
Muy cerca de la ciudad de Banff se encuentra Tunnel Mountain, llamada así porque los FPC intentaron excavar un túnel por debajo, pero en 1883 tropezaron con una serie de termas naturales en la ladera de la Montaña del Azufre. El túnel no se hizo però la zona se comenzó a promover como un recurso turístico internacional y así ayudar al desarrollo del nuevo ferrocarril.
La zona de Banff fue nombrado en 1884 por Lord Steven, un exdirector de Canadian Pacific Railway, recordando el nombre de su ciudad natal, Bahffshire (Escocia).
En 1885, Canadá estableció una reserva federal de 26 km2 en torno a las aguas termales convirtiéndose en el primer Parque nacional de Canadá.
A principios del siglo xx, los rieles fueron construidos en Banff por los internados de la guerra en plena era de depresión de los proyectos públicos.
Desde 1930, las comodidades del parque se abrieron durante todo el año.
Actualmente el parque abarca 6.641 kilómetros cuadrados de terreno montañoso con numerosos glaciares, campos de hielo, bosques densos de coníferas... Este parque linda con los parque nacionales de Jasper, Yoho y Kootenay. Los cuatro forman el conjunto natural denominado Parques de las Montañas Rocosas, Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO desde 1984.
Banff es uno de los destinos turísticos más populares en Canadá y recibe casi 5 millones de visitantes al año. Notamos esta gran diferencia con Jasper ya que éste es un parque mucho menos concurrido.
Como Banff es uno de parques nacionales más visitados en el mundo, la salud de su ecosistema se ha visto amenazada. A mediados de 1990, Parques de Canadá estructuró de forma drástica la gestión y el control de todo el parque para preservar su integridad ecológica.
Nos tropezamos con una mamá y una pequeña de la especie bighorn sheep (borrego cimarrón) por la misma carretera…
Y un oso negro (¡y ya van cuatro!) merodeando también al lado de los vehículos…
Visitamos el Lago Waterfowl, lugar (como la mayoría de lagos) ideal para el pádel surf o las canoas.
Visitamos el Peyto lake, para ello, andamos por un bonito sendero que parece las Ramblas (por la gran afluencia de personal), me costó hacer la foto sin nadie más que mis compinches...
Pero cuando llegamos al mirador, la belleza y su singularidad nos cautiva… ¡brutal!
Parece un photocall pero os garantizo que es real...
Las ardillas están presentes en todos los lugares que visitamos, no puedo dejar de fotografiarlas ya que son muy graciosas…
Nuevo lago, Bow lake, más accesible, con una playa muy tranquila. Montañas y glaciares lo enmurallan…
Precioso y fresquito…
Siguiente lago, Herbert Lake, más tranquilo…
Nos vamos acercando a la población de Banff donde dormiremos, escogemos la Bow Valley parkway, una carretera secundaria frecuentada por fauna autóctona
El premio nos lo da este escurridizo cervatillo aunque sólo nos enseña sus partes menos decorosas.
Esperábamos más fauna pero la carretera es preciosa, bosque denso y siempre la Castle Mountain a nuestra izquierda. Hacia la derecha el río Bow (aquí no se han estrujado mucho la mente para poner los nombres)
Dos chulitas con la Castle Mountain al fondo…
Y enfrente...
Vamos llegando a Banff que es el pueblo de mayor importancia del parque. A pesar de ello, no es un pueblo muy grande, ya que la urbanización está restringida al tratarse de un parque nacional. Cuenta con un número bastante alto de plazas hoteleras.
Un lago y una montaña cercana...
El dia ha sido intenso pero también para enmarcar. Llegamos al hotel, cena en el Ticino, piscina y a descansar...
Y mañana mucho más!
Buenas noches!!!
Maravilloso viaje!!
Increíble el Rio Sunwapta por el valle debajo de nuestros pies… y ni qué decir el Skywalk