Quizás por la intensidad de nuestras vivencias, la alteración de nuestro ritmo circadiano o la diferencia local horaria (se pone el sol a las 7,30 pm) llegamos a las 22h con un sueño fulminante. Eso hace que los adultos a les 6h estemos, si tenemos cobertura, trasteando los celulares.
Desayunamos en hotel mientras la mayoría de turistas ya han comenzado la ruta. No tenemos prisa, intentamos vivir en una paz budista continua, esa tranquilidad imposible en nuestras vidas cotidianas.
Cuando llegamos al Bryce Canyon algunos de los aparcamientos ya están completos, entonces entendemos la premura matinal de los visitantes. Conseguimos aparcar en el Inspiration Point (sugerente nombre) y subimos unos 20 metros de pendiente hasta el camino que rodea el valle principal del Bryce. A la primera de cambio nos quedamos impresionados, excitados, qué es esto! que maravilla! parece irreal, columnas pedregosas de diferentes tonalidades rosáceas (con blancos y grises) forman un conjunto único, os dejo una visión general pero parcial.
Damos un paseo por el perímetro. La parte alta del Canyon está cerrada, así que nos acercamos a la parte central, allí nos espera un visión brutal que nos proporciona la gran profundidad que desde lo alto no apreciábamos.
Al poco de empezar el descenso por el Bryce, entre altas columnas vemos dos Colibrís muy cerca nuestro, qué colorido tan intenso tienen! pequeños, rapidísimos, van recolectando néctar de una especie de flor de cardo fina con los pétalos delgados que está en la zona menos húmeda de este paraje.
Seguimos el sendero, voy como loco intentado captar imágenes pero son interminables...
Algún árbol intenta llegar a la luz.
Durante el recorrido nos acompaña una parte de la fauna local, ardillas diferentes (hemos contado ya 3 especies diferentes), una especie de abubilla azul, lagartijas regorditas... Eso sí, la ausencia de una especie frecuente en nuestro país de origen nos proporciona un inmensa felicidad. Por ahora no hemos visto ni un mosquito!
Seguimos por el camino ascendente hasta el Sunset Point, combinando columnas, zonas arenosas más suaves y bosque de coníferas. Considero que este ha sido uno de los mejores trekkings que he hecho en mi vida, así de simple y contundente.
Parte posterior al cañón.
Comemos algo en el Lodge del Bryce y volvemos, mientras vuelve a llover, al coche en el shuttle, ese maravilloso autobús que recorre gratuitamente todo el parque, en este caso hacemos todo el loop ya que el recorrido es circular pero no nos importa, lo que acabamos de ver nos deja enormemente satisfechos.
Continuamos la ruta panorámica 12 que pasa por Escalante, Boulder... En 200 km 2 pueblos, ya veis que no es una área muy poblada, pero es que además estas poblaciones no parecen tener estructura, casco urbano... son agrupaciones sin mucha gracia de algunas casas con la Post Office, algún centro de culto, algun motel y poco más... todo con un cierto aspecto reminiscente de las películas del oeste.
Cerca de Escalante visitamos un bosque petrificado, curioso aunque nada espectacular.
Durante todo el recorrido, el paisaje aunque no tan excepcional como en otras jornadas, no nos decepciona en ningún momento, siempre es diferente e interesante. Pasado Boulder quedamos sorprendido por una carretera que asciende hasta llegar a la parte más alta de la montaña! Acercándonos a Torrey (nuestra próxima parada) vamos recuperando bosques de alta montaña, aparecen las primeras hayas de tronco muy claro formando grupos y empezamos a ver, por doquier, gamos, esbeltos, grandes.
En contrapunto, vemos a un gamo en la cuneta caído por el choque de algún automóvil, cuantos animales mueren en todas las carreteras! nuestro impacto en la naturaleza es continuo y profundo.
El hotel que hoy nos cobija es del auténtico oeste con la omnipresencia de los cowboys. En recepción tienen un gran puma disecado. Nos dan una buena habitación y aunque fuera hace 20ºC aproximadamente nos damos un baño en la piscina que, para nuestra grata sorpresa, es cubierta y climatizada y tiene un jacuzzi con el agua calentísima. Buen final para un día inolvidable.
Breve cenita (palomitas, picoteo...) y nos "adormimos" con el aburrido desfile de las olimpiadas...
Com estic gaudint del teu blog! Em transportes allà i vaig seguint les votres passes amb l'ajuda de google maps.