Primera actividad del día: subir al pico Whistlers. Para tal empresa nos ayudamos del SkyTram Gondola, un pequeño teleférico instalado cerca de Jasper. Aunque nos salva un gran desnivel, es necesario subir 300m de altitud más para llegar a su cumbre.
La visibilidad se ve un poco reducida por el smog, mezcla de niebla (fog) y el humo (smoke) procedente de los lejanos incendios. Aun y así, la visión sobre este sector de las Montañas Rocosas es fantástica. Las montañas en esta altura (más de 2.200m) tienen poca vida por las dificultades del viento, frío y escasez de agua a pesar de la presencia de hielo durante gran parte del año.
Vista de los picos al Este…
Aquí se puede ver Jasper y el río Athawasca que atraviesa el valle que une Jasper y Banff.
En una de las dos cumbres del Whistlers. Hemos tenido bastante suerte ya que las condiciones meteorológicas son buenas.
Vamos a la segunda actividad del día: Maligne Canyon, antes de llegar un par de imágenes por el camino: el río Athawasca en primer plano y las montañas que envuelven el lago Maligne al fondo.
Y un estrecho puente…
Para ver el cañón, andaremos 5km, la mitad por un sendero superior que atraviesa el bosque codificado con “7f “ y después volveremos por el “7” más próximo al cauce del río.
Hay 6 puentes. Con el recorrido que hacemos llegamos al quinto puente. Hacia un lado…
Y hacia el otro
Pequeño saltamontes que produce uno de los pocos sonidos que rompe el silencio que impera en el lugar. Al volar producen un seco y continuo repiqueteo.
Remontamos el río Maligne. La primera mitad del recorrido el cauce sigue siendo ancho. El agua baja con mucha fuerza.
Un pequeño afluente cae en forma de cola de caballo…
Aquí vemos a la “pequeña” Noa…
Cualquier punto es de gran belleza…
El río se alimenta de diversos afluente, en este caso son aguas subterráneas con gran caudal que salen del acantilado...
Poco a poco las paredes se van acercando y se dificulta la visión del caudal de agua, entramos en los estrechos...
Aquí desde el cuarto puente y con nuestras figuras proyectadas…
Desde el tercer puente…
Y desde el segundo puente. Aquí ya es dificil ver el cauce. La profundidad es enorme…
Dejamos el recorrido sedientos y hambrientos. Mirar que zona de picnic nos agenciamos, justo al lado del quinto puente del río, entorno excelente…
De camino al siguiente objeto y cerca de Jasper nos topamos con un atrevido y solitario alce macho cruzando la carretera
Nos refrescamos en el Lago Pyramid. Como la mayoría de lagos, con su hospedaje, embarcadero, actividades de navegación... Comprobamos que la temperatura del agua es bastante baja, muy buena para mejorar la circulación sanguínea...
Hacemos parada fotográfica en el Patricia Lake...
Efectuamos un refrigerio en Jasper ya que seguimos muy sedientos.
Como nos “sobra” tiempo respecto a lo planificado vamos a visitar la falda del Mount Edith, concretamente al estanque Cavell y su glaciar adyacente. Resulta una excursión de primera. Poca gente y el paisaje (se me acaban los calificativos), espectacular.
Una simpática ardilla…
Aquí podéis ver el estanque Cavell y el glaciar del mismo nombre y el glaciar superior (Angel Glacier)...
El paisaje con sus agraciados excursionistas...
Más en detalle los glaciar, concretamente el Cavell Glacier donde podemos ver algunos icebergs y las diferentes capas sedimentarias que han alternado con las épocas frías...
El glaciar Angel...
Un descansillo
La vuelta... poco después de la instantánea, Mar empieza a correr porque piensa que aprovecha mejor la fuerza de la gravedad y su cuerpo se castiga menos pero al día siguiente comprobará que sus cuádriceps no opinan lo mismo...
Paramos en Athabasca Falls, una catarata muy caudalosa y ruidosa del río del mismo nombre...
Y aquí el posterior de la cascada, en forma de cañón…
Por el camino a nuestro último destino y paralelo a la carretera, no puedo parar de hacer fotos…
Llegamos a Sunwapta Falls, otras preciosas cataratas…
Las chicas…
Y la visión más “camiseteada”...
Esta cascada se encuentra a 600m de nuestro hotel. Esta zona es privilegiada por los cielos limpios que permiten la observación de los astros con gran claridad. Lo comprobamos por la noche cuando podemos ver la Vía Láctea.
¡Vaya día! Completo sería un corto adjetivo para la gran cantidad de maravillas visitadas.
A dormir que el festival sigue mañana…
Bona nit!
