A las 7h ya hace un sol casi de justicia.
A las 7,15h nos presentamos, todavía un poco adormecidos, en la oficina que organiza la excursión en barco.
Croacia tiene 1.244 islas e islotes. Hoy hollaremos algunas de ellas.
Nos transportaremos en lancha rápida con 7 personas más, 3 callados franceses y 4 indios de la India que viven en Alemania.
El joven conductor se llama Marco, un chico serio y profesional, y la joven ayudante, Lana.
Split tiene buena luz a esa hora aunque todo el horizonte está cubierto de calima que difumina, un poco, los contornos...
La lancha es suficientemente amplia para estar cómodos.
Empieza a deleitarnos sentir el aire y el balanceo...
Aunque a alguno lo trastorna un poco...
"Volamos" por encima de las, no siempre, suaves olas adriáticas durante unos largos 105 minutos hasta la isla de Biševo donde se ubica uno de los atractivos principales del recorrido, la cueva azul (Blue Cave). "Sólo" hay 500 personas por delante nuestro y el recorrido se tiene que hacer con lancha especial. Aprovechamos para visitar la cueva de la foca monge (Monk Seal cave) mamífero extinguido por la incorrecta praxis de los anteriores pobladores de ésta ínsula (excesiva caza). Este mamífero todavia puebla algunos rincones del Medirerraneo pero solo en reductos. Si, entre todos, nos descuidamos serà otra de las especies que nunca más existirá... la cueva es estrecha, con nuestra barca podemos entrar unos metros e intuir el resto.
También da tiempo para un baño en estas aguas estraordinariamente transparentes y de alta variedad de azules, verdes, turquesas...
Por fin nos toca! Subimos a la lancha con la que entraremos a la Blue Cave agachando cabezas para evitar el chichón...
Y dentro, un espectáculo de luz...
Siguiente visita, una playa de la isla de Vis que los rankings ponen entre las mejores de Europa. Era una cueva que se colapsó y se abrió al mar. Hacemos un poco de esnòrquel, podemos ver peces, erizos, posidonia...
Siguiente parada, Blue Lagoon, área entre un conjunto de islas, llamado Paklinski Otoci. Un espacio brutal, agua serena, nítida, de temperatura ideal... nos estaríamos horas...
Penuntima parada, la isla de Hvar, la más poblada de las islas croatas de estas latitudes. Breve visita al pueblo, buen condumio en el restaurante Vartal, breve visita al pueblo y un helado para contrarrestar la alta temperatura...
Y última visita de este fantástico día, el complejo nocturno Carpe Diem Beach, en un islote enfrente de Hvar. No nos podemos abstener de darnos un refrescante baño...
Un club nocturno de primera...
Regresamos mientras va llegando el ocaso, con esa sonrisa de haber disfrutado ingentemente.
Ha sido un espectáculo de playas, agua, luces... y una tregua del calor y los mosquitos.
Atracamos a puerto a las 19h.
Compramos pan para cenar, algún capricho dulce, cenita y la pertinente velada del Piko Piko...
Que tingueu molts bons somnis (dormint i desperts)!