Desde el hotel se puede ver una formación de rocas paralelas a la costa que en marea baja simula una cola de Ballena. El hotel Vista Ballena, está en la loma que asciende desde la línea de mar y se accede por caminos empinados con vistas espectaculares de todo el entorno.
Recogemos el desayuno en bolsa (ya que no lo despachan hasta las 7h en el hotel) a las 6,45h y nos vamos a las 06:50 horas hacia Uvita a la oficina del operador Bahía Aventuras para realizar el Tour de Corcovado.
Partimos desde Playa Punta Uvita a las 7:30 AM en lancha colectiva con destino a la estación San Pedrillo en el Parque Nacional Corcovado con una duración aproximada de 1,5 horas.
El Parque Nacional Corcovado es la última reserva sostenible del Bosque Tropical Lluvioso de las Tierras Bajas del Pacífico de América Central. Localizado en la Península de Osa en el Suroeste de Costa Rica.
Corcovado es la "Joya de la Corona", sólo en este pequeño territorio, podemos encontrar el 60% de las especies que viven en Costa Rica. Según el National Geographic, el lugar más intenso del mundo en biodiversidad.
Hoy todos los embarques y desembarques se hacen a la antigua usanza (wet landing) ya que no hay puertos en toda esta costa.
Desde el inicio de la navegación vemos volar diferentes aves como, por ejemplo, las fragatas, aves piscívoras de gran envergadura.
Al poco de empezar la travesía vemos dos tortugas loras muy grandes finiquitando su apareamiento que según el guía, puede durar unos 3 días .
Cuando ya estamos cerca de la costa vemos dos ballenas jorobadas, madre e hija muy cerca del barco. Momentazo. Van saliendo al exterior cada 2-3 minutos.
Llegamos a San Pedrillo. Estación del Parque Nacional.
Haremos dos recorridos, el primero transitando por un bosque secundario. En todo el parque no hay pobladores. Este espacio es secundario porque hace décadas lo poblaron personas que cortaron el bosque para cultivar y poder subsistir. El estado los reubicó y se ha ido construyendo un bosque complejísimo. Ahora en el P.N. sólo hay guardaparques que trabajan 20 días seguidos y descansan 10 además de algunos escasos alojamientos turísticos.
Como podéis ver, ya es un bosque maduro.
Debido a la gran presencia de agua, muchas raices quedan al descubierto.
Frecuentan las heliconias, plantas cuyas hojas servían de techo para los indígenas. Sus inflorescencias son resguardo de serpientes muy venenosas, Ramon, el guía nos lo explica después de hacer yo esta foto, por suerte, no había ninguna a la expectativa.
De repente, otro guía nos avisa que hay tapires cercanos, animal difícil de ver y en peligro de extinción. Damos varias vueltas hasta encontrarlos, al macho no le importa mucho que nos acerquemos...
Mientras hemos ido acercándonos al tapir ha empezado a llover. La llovizna se ha ido convirtiendo progresivamente en lluvia torrencial. Lo que antes era tierra se ha embarrado y lo embarrado se ha inundado.
El tapir come frutas que, como pasa a menudo en la naturaleza, disemina sus semillas cuando las excreta, que, curiosamente solo lo efectúa en zonas empantanadas.
Uno de los grandes árboles que pueblan este entorno es el Seiba barrigón que es "familia" del baobab. Es hueco y almacena agua en su interior. Recurso para supervivientes. Este árbol y algunos otros presentan protuberancias callosas que les sirven para filtrar la sal del agua marina que en este caso se encuentra a muy pocos metros.
Nos topamos con un termitero, fuente de proteínas para robinsoncrusoes, pesadilla para propietarios de casas de madera y protector "salvaje" de antimosquitos por su ácido fórmico.
Nos vamos calando hasta las trancas pero seguimos. Volvemos a la estación de San Pedrillo.
Pensamos que descansaremos o esperaremos que amaine... pues ¡no! Visitaremos el bosque primario, éste que ha estado inalterado durante siglos.
Vemos un Gavilán cangrejero en lo alto de una palmera abriendo sus alas para limpiarlas. Con la que cae, las debe tener muy aseadas.
Escuchamos el grito ensordecedor de un mono aullador lejano.
En la playa de San Pedrillo no es recomendable el baño por la presencia de cocodrilos que a veces salen del río al mar a pillar manduca, los guías primero nos los enseñan a unos 50 metros...
Y después nos piden que crucemos el río ya que no hay otra forma para acceder al bosque primario... más adrenalina...
Por desgracia también se ve esa especie que contamina todo el planeta, en este caso son plásticos foráneos, a veces procedentes de la otra punta del mundo.
Vemos varios monos araña en la altura que, según el guía, son incompletos porque sólo tienen 4 dedos
Otro gran árbol que nos encontramos es el Sangrillo, su savia tiene color sangre y es medicinal.
En Costa Rica hay 100 especies de murciélagos, tres de ellas chupan sangre, sólo uno de humana, el cual tiene una envergadura de un metro y el nombre, ¿como no?, de vampiro. Nos encontramos con unos ejemplares que, por suerte, solo comen frutas, descansa debajo de hojas, las cuales muerde antes para mejorar el cobijo.
Vemos a un pavón macho en un árbol y dos hembras en tierra...
Otro árbol monumental, el Ajillo, tiene flor amarilla de olor a ajo, está en peligro de extinción, este ejemplar tiene 800 años y 60 metros. Parece ser que por aquí suele frecuentar un puma...
En un árbol cercano un pajarito protegiendo sus dos huevos del nido, se le llama hormiguero por su dieta..
De este árbol se aprovechan las puntas ya que son analgésicas
Nos cruzamos con un Basilisco, lagarto salido de "parque jurasico". Es muy rápido...
A pocos metros, podemos observar una Guatusa, gran roedor que, para la buena salud del bosque y como hacen las ardillas, siembra semillas y se olvida donde las dejó.
Volvemos por la playa llena de cangrejos fantasma y ermitaños.
Vemos una garza tigre...
Llegamos exhaustos, enbarrados, empapados pero supercontentos de todo lo que estamos viviendo. Es una sensacion extraña de salvajismo, excitación... casi inexplicable.
De repente nos reclama el guía. Un oso hormiguero en la copa de los árboles!
En este hábitat siempre hay ruidos, todos naturales, mono aulladores, chicharras, cantos, reclamos o avisos de pájaros, pasos de animales sobre el suelo quebradizo... me encanta esta orquesta.
Nos trasladamos en la lancha a San Josesito. Nos damos un baño, y nos preparan la comida que resulta de una calidad y sabor sorprendentemente excelentes, arroz con pollo, arroz con verduras, ensalada de remolacha, salsa lizano, salsa de chile, pastel de banano, piña y sandía.
Volvemos a Uvita. Poco después de zarpar, nuevo festival ballenero que incluye piruetas, saludos de aleta. Increíble...
Mientras llegamos se nos cruza un Pelícano gris.
Después de atracar a muchos metros desde donde habíamos embarcado, ya que la marea ha retrocedido mucho la línea de mar, se nos cruza un ardilla que sube una palmera...
Regresamos al hotel con ganas de ducha, relax, juegos de cartas, cenita y poco más...
Un gran sapo nos da las buenas noches...
Impresionante. Inolvidable
Parece la familia robinson Crusoe
Y Felix Rodigrez de la fuente
Juntos.
Me encanta viajar con vosotros.
Esta vez aventureros total!!!
Uauuuuu!
Fantàstic.Quin viatge, quina experiència i ho expliques tan bé.
Quin bo poder-vos veure a les fotos.
Una abraçada.
Agnès Sellés