Hoy comienza la actividad a las 8h en Bahía Adventures, somos una veintena, la mayoría angloparlantes y dos gallegas a punto de acabar su viaje.
Antes de salir ya tenemos premio animal, una gran iguana vegetariana...
Vamos en un lancha como la de ayer pero con asientos un poco más cómodos. Estos barcos van asiduamente a una velocidad muy alta, entre 30-40 km/h, lo cual provoca saltos un poco bruscos. Sin turistas pueden alcanzar el doble. Una barbaridad.
Nada más salir, un banco de atunes nos acompaña saltando alegremente por la superficie.
Algunos pelícanos y otras grandes aves se nos cruzan en nuestra trayectoria.
En seguida empezamos a ver ballenas jorobadas, una madre y una hija. Para verlas es como bailar con ellas, van cambiando la dirección y el capitán las sigue, intentando intuir por donde volverán a salir para respirar o por pura diversión, conseguimos acercarnos mucho.
Estos individuos provienen de la Ántartida, allí se han alimentado de krill, arenques, sardinas... y vienen aquí a aparearse y reproducirse. El embarazo dura un año, un verano hacen el amor y el otro dan a luz por estas latitudes.
La madre puede hacer casi 20 metros, el pequeño unos 4 metros. Van juntas durante el primer año del "bebé".
Los ejemplares más grandes pueden llegar a pesar 40 toneladas.
Vemos una tortuga pero no la prestamos mucha atención porque enseguida volvemos a ver ballenas.
Otra madre y otra hija.
Segun Risto, el guia, éstas son unas ballenas un poco ariscas ya que cambian de dirección más frecuentemente para despistarnos. No les gusta tanto bailar.
Las ballenas no duermen, sólo descansan, si durmiesen más de 30 minutos podrían morir.
Nos damos un baño en medio del océano y al lado de las ballenas.
Nos dan buena fruta en la lancha y seguimos viendo la escarpada costa con su vegetación y cuevas.
Bordeamos la costa entendiendo porque ha sido escenario de películas como Apocalypso (Mel Gibson) o la serie de Jurassic Park.
Nos acercamos a la Cola de Ballena, una construcción totalmente natural. Os voy a acompañar este texto con una fotografia extraída de internet (hasta ahora todas las fotos han sido nuestras) para que la contempléis en su plenitud.
Acabamos el tour, de nuevo, en la playa donde nos acompaña una mariposa amarilla.
Y cerca de un cartel informativo...
El cartel tiene su fundamento, cerca vemos estas dos crías.
Vamos hacia la siguiente parada, Manuel Antonio. Justo antes del hotel nos paramos a comer en el restaurante El Avión, no sé porque le han puesto este nombre...
¡Qué buenos los zumos naturales que preparan en cualquier restaurante!
Llegamos al hotel Costa Verde, nos dan una habitación espectacular con vistas increíbles al parque nacional Manuel Antonio.
No sé si el hotel está hecho en el bosque lluvioso o que el bosque lluvioso se ha "comido" al hotel. Sin irnos muy lejos (a 50 metros de nuestra habitación) podemos ver "nuestros" primeros perezosos descansando en la alto de los árboles.
Un ave terrestre de color rojizo, varios lagartos, una mariposa XXL (de más de 20cm de amplitud cuando abre las alas)
Desde el hotel nos ofrecen un tour nocturno, yo estoy como loco por ver ranas de colores, convenzo a mi comitiva de llevarlo a cabo. Nos recogerán a las 17h para llegar cuando anochezca y comenzar la caminata nocturna.
Nos reponemos un poco en la habitación mientras vuelve a diluviar en el exterior. Por suerte para nosotros deja de llover cuando empezamos la visita a una charca cercana a la pequeña población de Río Seco.
Os intento explicar muchas de las cosas que nos suceden más o menos fidedignamente pero hay algunos aspectos que son imposibles de trasladaros. Uno es el olor dulce que dejaban en el ambiente estos lirios de agua...
Otro aspecto és el acústico, cuando llegamos a nuestro destino los diferentes sonidos que provocaban los anfibios del lugar era brutal, parecia una orquestra con diferentes instrumentos.
Esperamos unos minutos que sea más de noche, cogemos las linternas y a descubrir...
Nada más empezar, nos encontramos a una rana enmascarada y una narizona juntas, ésta última és responsable del ruido más escandaloso y trompetero de los se escuchan.
Muy cerca una larga y fina serpiente que se encarama a la heliodontas a devorar ranas como por ejemplo la pequeñas rana de lluvia.
Estas dos ranas de ojos rojos (el macho más pequeño y arriba) estaban intentado perpetuar su especie. Esperamos no haberles molestado mucho...
El sapo: muy grande, muy tóxico y con un sonido parecido a un percutor.
La rana toro, el anfibio más grande de Costa Rica.
Un saltamontes comiendo...
La rana amarilla arborícora.
La rana leopardo.
Es impresionante la cantidad de especies que se encuentran en un espacio tan reducido. Éste es ideal, la charca está rodeada de hojas grandes donde les gusta encaramarse.
Este soy yo, hipnotizado y desorientado por este gran espectáculo...
También vemos otras tipos de animales, por ejemplo algunas enormes polillas nocturnas.
Dejamos la zona húmeda y pasamos a un sendero cercano para adentrarnos en el bosque lluvioso.
Nos encontramos con la salamandra (muy diferentes a las salamandras "nuestras").
Un ciempiés de tamaño considerable.
De repente el guía da un respingo ya que se ha encontrado de súbito con una de las serpientes más peligrosas: la serpiente terciopelo, responsable del 90% de los accidentes causados por serpientes venenosas en Costa Rica. Es un ejemplar con un fuerte tóxico y de un tamaño importante (un 7-8 cm de diámetro). Nos obliga a dejar el estrecho camino y volver ágiles hacia atrás, imposible seguir avanzando con ella en el camino.
Una rana de ojos rojos en la baranda del camino.
Y una araña lobo también tóxica pero sólo si la tocas.
Una cena local y regreso al hotel...
👏👏Cuanta fauna variada en un solo dia. Increible. Seguir disfrutando 👏👏👏